NEUQUÉN (ED) — La extensión de la pandemia del coronavirus golpeó a las escuelas de todo el país que debieron readaptarse a la nueva normalidad. En ese contexto, y ante la urgencia de los tiempos, el colegio ECEN sorteó rápidamente obstáculos y ya se encuentra trabajando para el próximo ciclo lectivo.
“No pudimos haber hecho todo sin las familias, en esta escuela es la base de todo trabajo que emprendemos”, destacó Débora Badilla que a modo de balance redobló la apuesta de la Fundación que dirige la escuela y ya anticipó cambios para mejorar el seguimiento de las clases del próximo ciclo.
Se trata de una reestructuración de las plataformas de e-leaning que permitió darle una continuidad ininterrumpida al ciclo lectivo.
“Las familias nos vuelven a elegir porque la escuela trabaja sobre los valores. Es una de las escuelas más antiguas de Neuquén, desde 1974 continúa un trabajo en el que enseñamos el mensaje de la FE, que tiene fundamentos cristianos”, señaló Badilla y aclaró que todos los años reciben nuevos ingresantes “aunque existe el mito que por la demanda nunca hay lugar”.
Desde el colegio recordaron que se encuentran abiertas las inscripciones para el ciclo lectivo 2021 en todos los niveles y en sus dos sedes de Neuquén y Senillosa. También comenzaron las reuniones por Zoom con las familias de los postulantes.
A modo de balance, desde el colegio se recordó el trabajo pedagógico de los docentes y toda la comunidad educativa que desde el primer momento de la cuarentena y luego el aislamiento, continuó con sus actividades y cuyos logros se cosechan sobre el cierre del año.
Al igual que otros años, ECEN dio continuidad a la entrega gratuita de la biografía de la editorial ACES como así también formalizó bonificaciones a las familias con muchos hermanos que asisten al colegio
Con las expectativas renovadas por el próximo año, Badilla recordó que se sostuvo a toda la planta de docentes sin aumentar las cuotas pese a la fuerte devaluación porque la escuela escuela responde a un fin social. En esta línea recordó que el colegio no recibe subsidios como otros colegios públicos de gestión privada y la mayoría de los sueldos docentes son cubiertos por la administración de la Fundación.
Por su parte la presidenta de la FECEN, Norma Huento, destacó que “la Escuela no trabaja sola, trabaja junto a la familia. Muchos de los padres y madres de hoy fueron estudiantes de la escuela en su niñez y eligen para sus hijos esta institución en la que transitamos juntos la mejor época que tiene una persona. Educar para la vida con valores cristianos y perdurables, es nuestro principal objetivo”, enfatizó.
