Nostalgia y diversión en el carnaval de Provincias Unidas

El ciclo autogestionado por los vecinos "Verano en el Barrio" dio lugar ayer a una guerra de agua que contó con la participación de 400 personas de todas las edades.




NEUQUÉN (ED) — La comisión vecinal del barrio Provincias Unidas organizó un carnaval de agua ayer por la tarde. Con la participación de familias y vecinos de otros barrios, la colaboración de Bomberos y el esfuerzo colectivo, lograron inflar 5000 bombitas de agua y continuar una tradición en desuso con los más chicos.

En el contexto del ciclo autogestionado llamado Verano en el Barrio, la jornada de sol contó con la participación de 400 personas de todas las edades. Jaime Vallejo, presidente vecinal, explicó que tenían preparadas actividades para niños y niñas “desde tres años hasta quince, pero se sumaron de 17, 18, un señor de 63 jugando, una señora de 74 tirando bombitas”.

Aprovechando las instalaciones del polideportivo del barrio para contener a los niños y niñas, la guerra de bombitas culminó con la participación de Bomberos, quienes llevaron un coche y provocaron una lluvia de agua.

El financiamiento de las actividades en Provincias Unidas es gran parte colaboración vecinal, con apoyo de la subsecretaría de Espacios Verdes, la secretaría de Deportes, Acceso a la Justicia, Promoción de Actividades Públicas y Relaciones Institucionales de la municipalidad y algunas empresas locales.

El ciclo Verano en el Barrio comenzó con la proyección de la película El Rey León y continuó ayer con el carnaval. La próxima semana habrá kabuki en la Fiesta del Anime, el 24 realizarán la primera fiesta del río Neuquén y, al respecto, Vallejo afirmó “nunca lo hemos revalorizado como merece, la fiesta es para volver a aprovecharlo como hace algunos años atrás”. Además, habrá un torneo de fútbol participativo para adultos y, en los primeros días de marzo, tendrán el corso de la murga Gigantes del Este.

La comisión está recibiendo devoluciones de agradecimiento por parte de sus vecinos, quienes afirman que se divirtieron y, algunos, hasta se emocionaron y sintieron nostalgia. Los objetivos del carnaval eran recuperar una tradición perdida, ya que desde el 2010 que no se organizaba; pasarla bien en comunidad disfrutando del verano y, principalmente, generar conexiones y alianzas con los vecinos.

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