NEUQUÉN (ED) — El director de la clínica Pasteur, Juan Peláez, confirmó que el brote de coronavirus entre trabajadores de la institución fue controlado y que 67 hisopados a trabajadores y pacientes arrojaron resultados negativos. Actualmente, tres enfermeras que adquirieron el virus permanecen aisladas y la Pasteur sólo recibe nuevos pacientes si se trata de infectados con COVID-19.
“La semana pasada detectamos contagios en tres enfermeras, una de ellas se contagió en otra institución de salud y las otras dos, por contagio comunitario. Inmediatamente las aislamos, evaluamos los contactos estrechos, entre los que había pacientes y más personal de trabajo, como enfermeros, camilleros y médicos. Procedimos a hacer muchos hisopados, a 36 trabajadores y 31 pacientes. Ayer tuvimos el último resultado que faltaba y, como los anteriores 66, dio negativo”, expresó Peláez en comunicación con FM Capital.
“Es una gran tranquilidad porque los contagios no fueron dentro de la clínica y porque nos indica que el personal está trabajando con medidas de seguridad, con cuidados y distanciamiento. No obstante, es un virus altamente contagioso y si bien los resultados fueron negativos, podría haber sido lo contrario, como sucede en muchas instituciones de salud”, aclaró Peláez.
Asimismo, informó que todas las personas hisopadas fueron aisladas, lo que provocó una faltante entre el personal en la planta de clínica médica. Por ello, decidieron no recibir pacientes derivados de otras clínicas y hospitales, aunque se está trabajando con normalidad en la unidad coronaria, terapia intensiva, quirófano para cirugías de urgencia y en maternidad y neonatología.
La clínica Pasteur es el centro COVID de la ciudad, junto con el hospital Castro Rendón. “Tenemos internados en terapia intensiva a ocho pacientes y, en clínica médica especial para COVID, hay internados 12 pacientes. Muchas camas de terapia intensiva están ocupadas con pacientes respiratorios con otras patologías, por la temporada invernal. Hay que tener cuidado, no sólo por el COVID, para que no sature el sistema sanitario por el resto de las enfermedades”, explicó el médico.
Sobre las herramientas descartables que previenen el contagio de coronavirus entre los trabajadores, el director manifestó que no hay faltantes, pero que “los precios son una locura, la especulación es obscena. En diciembre, un barbijo de industria nacional se compraba a $4 cada uno, en marzo $120. Esto se da con todo, camisolines y alcohol en gel también”.
