Otro más… ¿llegará alguno sano antes de entregar el servicio?

Uno tras otro se rompen los colectivos del servicio público en Neuquén

Otro colectivo roto de Indalo Foto gentileza ED



NEUQUÉN (ED) — Una nueva unidad de Automotores Neuquén, o Indalo como prefiera llamarlo, sufrió desperfectos mecánicos dejando fuera de servicio al coche de la línea 13 que repleto de pasajeros transitaba por Abraham y lago Cochico, cerca de la concurrida calle Catriel.

Sólo la pericia del chofer que , marcha atrás y en descenso logró “encajarlo” en la vereda, evitó un nuevo accidente.

Días atrás, un colectivo quedó cruzado sobre una vereda en Plottier, en un incidente que podría haber sido tragedia si ocurría en un sector de mayor tránsito. El saldo fue algunos pasajeros heridos, y una mujer hospitalizada.

Hace algunas semanas, otro micro sin frenos, inició una loca carrera por plena calle Buenos Aires de Neuquén, embistiendo cuatro autos, para terminar detenido contra un árbol, sobre la vereda de la Vuelta de Obligado, es decir que recorrió unos 500 metros sin control, sólo maniobrado por un desesperado chofer que no podía hacer demasiado.

Estos son algunos de los casos, porque también recordamos colectivos incendiados, gomas reventadas, o algún que otro contratiempo que los deja fuera de servicio en pleno recorrido.

A Automotores neuquén le queda poca vida útil en la ciudad de Neuquén, porque perdío la licitación y dejará de prestar el servicio público de pasajeros, concesionado por el municipio, en un par de semanas. Pero, en Plottier continuará siendo la empresa que lo brinde, y hay extrema preocupación entre los usuarios por los riesgos que corren día a día.

Luego del accidente de calle Godoy Y San Martín, pidieron al municipio de Plottier que aumenten los controles sobre la empresa.

Desde el gremio UTA denuncian que los mecánicos “desarman una unidad para armar otra”, y los choferes profesionales “hacen lo que pueden” para terminar los recorridos sin contratiempos.

Evidentemente, las empresas reducen gastos poniendo en peligro a sus trabajadores y a todos los pasajeros que son rehenes del servicio, a pesar de estar subsidiadas por el Estado y no perder nunca dinero.

Evidentemente algo en este sistema no funciona bien.

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