NEUQUÉN (ED). — El avance de los paseos costeros que realiza la Municipalidad de Neuquén hacia la confluencia de los ríos Limay y Neuquén, se topó contra la firme postura de vecinos que no sólo salieron en defensa el área natural protegida, sino que además denunciaron la depredación del paisaje para tapizarlo con cemento. Peor aún, hay quienes deslizaron sospechas de un eventual negocio inmobiliario, que pueda seguirle al avance (ahora detenido) de las topadoras, las palas mecánicas y otras máquinas.
El conflicto encuentra al intendente Mariano Gaido en la cuenta regresiva hacia las elecciones de concejales y de cara a la temporada estival, en la que tiene previsto coronar las obras costeras, emblema de su gestión.
Este martes, desde Ambiente en Lucha e Izquierda Socialista se solidarizaron y apoyaron el reclamo que llevan adelante vecinos de los barrios Confluencia Urbana y Confluencia Rural, en torno a lo que está ocurriendo en el Área Natural “Protegida” de la Península Hiroki, en la confluencia de los ríos Limay y Neuquén.
“Hace una semana avistaron movimientos de máquinas viales y de construcción en la zona del bosque ribereño, un lugar natural con senderos, vegetación, abundante fauna y costa de río que utilizan cotidianamente para esparcirse. Al llegar al lugar constatan que estaban rellenando parte del río, destruyendo el bosque, los senderos y la propia orilla del río con topadoras”, relataron.
Agregaron que “el municipio del intendente Mariano Gaido (MPN) avanzó, sin ningún tipo de consulta a los vecinos, con la cementación indiscriminada del ex-intendente Pechi Quiroga (PRO). Los gobiernos municipales se han encargado de destruir áreas naturales que están registradas como reservas protegidas, tal como ocurrió con la barda detrás de la Universidad del Comahue, la Isla 132 o la Cantera clandestina del barrio Mercantiles”.
“Lejos de proteger los pocos lugares verdes que quedan en la ciudad, destruyen y llenan de cemento para continuar con el Paseo Costero. Se acerca el verano y el Gobierno Municipal solo ve negocios en las costas del río. Ante este atropello, jóvenes del barrio se acercaron y lograron detener las máquinas que destruían indiscriminadamente el bosque. Junto a vecinos y vecinas exigen a la Municipalidad estudios de impacto ambiental y mitigación de los daños ya causados por las máquinas”, completó en un comunicado.
Advirtieron también que “luego de frenar las obras, las y los vecinos se alertan el día jueves 23, entrada la tarde, descubren que el bosque protegido estaba siendo incendiado. Una maniobra que ya ha sido vista en diferentes zonas del país cuando queman los bosques, humedales o pastizales para continuar con sus negocios una vez que este todo arrasado. En Confluencia no se lo vamos que permitir”, advirtieron.
Desde Ambiente en Lucha denunciaron “al Gobierno Municipal de Gaido que avanza sobre áreas naturales protegidas para la cementación, sin respetar el ambiente, ni la decisión de los vecinos de proteger los bosques y el río”. “Exigimos el cese de esta destrucción y respuestas a los y las vecinas que se están organizando contra esta destrucción”, apuntaron.
