BUENOS AIRES (NA-ED) — Un multitud de argentinos en diferentes ciudades del país volvió a salir a la calle y en forma pacífica protestó contra el rumbo del gobierno de Alberto Fernández, donde se sumó entre otros el reclamos, la decisión de la Corte sobre los jueces desplazados.
Con menos peso de las restricciones del aislamiento, la cantidad creció en relación a la últimas manifestaciones y dejó un nuevo llamado de atención. Sin una fuerza opositora única, la calle visibilizó a referentes del PRO y libertarios pero también radicales, con claro predominio de las banderas argentinas, una marca registrada de las convocatorias.
Al igual que las recientes protestas, que se repitieron con regularidad durante los últimos seis meses, el banderazo del “8N” englobó distintos reclamos entre los que se destacan la independencia de poderes, el respeto a la Constitución, la seguridad y la situación económica.
Se trata de la novena manifestación en contra de la gestión de Alberto Fernández desde el inicio de la cuarentena y antes de su primer año de gobierno. Las anteriores fueron el 20 de junio, el 9 de julio, el 1°, 17 y el 26 de agosto, el 13 y el 19 de septiembre, y el 12 de octubre. Las mayores concentraciones se dan en la ciudad de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.
Por primera vez el banderazo no entró en conflicto con la cuarentena ya que el viernes Alberto Fernández anunció el comienzo de una nueva etapa: el DISPO (Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio).
Al igual que el pasado 12 de octubre, cientos de personas se concentraron frente a la Quinta de Olivos con cacerolas, entre los manifestantes estaban los economistas Javier Milei y José Luis Espert, y Juan Carlos Blumberg.
