NEUQUÉN (ED) — A pesar de las ráfagas de más de 60 km/h, el segundo día de la Fiesta de la Confluencia se desarrolló con la presencia de miles de neuquinos. Con decenas de diversas actividades gratuitas para todas las edades, esperaron el gran cierre musical de rock a la noche, con la presencia de Ciro y los Persas y Ratones Paranoicos.
El circuito de la Isla 132, constantemente transitado por familias y grupos de amigos, proponía en su entrada el recorrido de Dino Aventura, con esculturas y marionetas de dinosaurios; un cuarteto de jazz clásico; y una feria de más de 150 artesanos que ofrecían plantas, lámparas de sal, tejidos, indumentaria, pintura en vivo, sesiones de reiki, juegos de realidad virtual y, por supuesto, productos gourmet como chutney, dulces, hongos al escabeche y garrapiñadas de soja.
El aroma a caramelo y pochoclos del ambiente equilibraba la gran cantidad de tierra en suspensión por la agresividad de las esporádicas ráfagas. Varios stands corrían peligro y sus feriantes hacían lo posible por mantener las mercaderías en orden.
Además, se instaló una tienda de descanso con sillones puff, escenarios para jóvenes y para niños con música, baile y teatro, un mini skatepark para adolescentes, tirolesa, slackline, palestra, un circuito de karting a pedal, bumper balls, fotocabina y sillas voladoras que se elevaban en el Paseo de la Costa por encima del edificio Cordineu.
Desde Limpieza Urbana dispusieron de camiones recolectores, una grúa pala y una grúa miniatura para que niños y niñas tengan la experiencia de operar una, con chalecos refractarios y cascos incluidos. También se habilitó un parque de diversiones y un sector gastronómico importante, con docenas de stands ofreciendo meriendas, cenas y cervezas.
En cuanto a las presentaciones, desde las 20 tocaron en el escenario principal Hysteria Lunar, Los Viajes, Puel Kona y Zezé Tribu. A partir de las 21, miles de personas comenzaron a ingresar al predio para sumarse a la fiesta y ver el cierre de rock con Ciro y los Persas a las 23 y, a la 1 de la madrugada, a la mítica banda de Juanse, Ratones Paranoicos.
