NEUQUÉN (ED) — Representantes de las tomas del oeste volvieron a reunirse hoy por tercera vez, convocados por el Ministerio Público Fiscal. El encuentro tuvo nuevamente como protagonistas a los ocupantes de los terrenos y representantes del gobierno provincial y municipal, que esperan una salida pacífica, que evite el desalojo.
La propuesta del Gobierno fue realizar un relevamiento puntual de cada familia para conocer el estado de situación real, en tanto, los ocupantes se niegan a abandonar los predios hasta tanto no se les indique a donde trasladarse, en lo que parece el punto de inflexión más fuerte de la negociación.
Durante el fin de semana la toma de Casimiro Gómez y sus alrededores creció en cantidad y calidad. A las rudimentarias construcciones se sumaron chapas y se delimitaron los terrenos con puntales y sogas. El movimiento de gente se extendió hasta la noche del domingo.
En diálogo con radio La Red, el concejal MPN Atilio Sguazzini reiteró la necesidad de “una construcción en el diálogo poder sanear la situación” y recordó la importancia de abordar el déficit habitacional a través de un trabajo conjunto que incluya: Nación, Provincia y Municipio.
Y reiteró que en las tomas “conviven distintos tipos de intereses, aquellos que tienen necesidades reales, algunos especulativos y algunas organizaciones políticas, que pretenden otro tipo de situaciones”.
