NEUQUÉN (ED) – Es uno de los temas más polémicos que se discute por estas horas previas a las PASO del domingo y que el martes, tuvo un capítulo más por la polémica del software que utilizará la empresa Smartmatic para hacer el recuento de votos tras el envío de los telegramas de todo el país.
La discusión entre oficialistas y opositores se inició a partir del cambio establecido para estos comicios, con telegramas que no pasarán por las oficinas de correos sino que directamente irán al centro de cómputos. Lo resuelto está muy lejos de conformar no solo a representantes de fuerzas políticas sino que también generó interrogantes entre los especialistas. Uno de ellos es el ex decano de la Facultad de Informática de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), Claudio Vaucheret, quien no dudó en señalar que hay problemas de confiabilidad en el sistema.
“Hacen el escaneo de los telegramas en un formato y después, se transforma en otro formato”, explicó Vaucheret, quien de esta manera planteó la posibilidad de un fácil hackeo. Y fue más allá, recalcando que no se necesita ser un especialista en sistemas sino que “cualquier persona puede hacerlo, es fácilmente hackeable”.
En una completa explicación a través de radio Calf, el especialista en informática indicó que se desconoce por qué se utilizan aplicaciones viejas y que exigen, para más seguridad, actualizaciones.
Sobre el reclamo realizado, evaluó que los “partidos políticos se encuentran indefensos” y que es muy desprolija la entrega de software a cuatro días de las elecciones cuando había un compromiso de un mes antes.
Por otro lado, en relación a los supuestos beneficios en la celeridad del escrutinio, Vaucheret lo descartó y expresó que “no tiene ninguna justificación” el cambio impulsado por el gobierno. Y se quejó del contrato con la empresa privada cuando “el Estado tiene capacidad de hacer sistemas mucho mejores”. Sin dudar, resaltó que “son negocios”, que poco contribuyen a la transparencia del acto electoral.
