NEUQUÉN (ED) — Ayer Guillermo Castejón, subsecretario de Obras Públicas dijo que “si los vecinos no podían disponer del servicio de agua potable es por responsabilidad exclusiva del EPAS”. Ante está declaración el Ente Provincial de Agua y Saneamiento hizo el descargó de lo que el funcionario municipal expresó sobre el suministro de agua en Toma Pacífica.
Fue el EPAS quien realizó la primera denuncia pública por la red de agua no supervisada. Desde la empresa provincial explicaron que los papeles necesarios para la inspección fueron presentados por el Ejecutivo local cuando la obra ya estaba finalizada y pretendían que se les habilite la conexión a la red existente del Ente.
“El pedido de inspección de obra llegó al EPAS cuando las redes de Toma Pacífica ya estaban hechas e incluso con algunas mangueras listas para conectar a los domicilios”, explicó el Gerente General de Servicios Neuquén, Esteban Rodríguez.
Y agregó: “Si ya está todo hecho que vamos a inspeccionar. No sabemos qué materiales se usaron ni si se hicieron pruebas hidráulicas o si las cañerías pasan por los puntos exactos según el proyecto que tuvo la aprobación final”.
El responsable del servicio en la ciudad expresó que la situación actual “no sucedería si se firmara finalmente el contrato de concesión que el Gobierno de la ciudad tiene en su escritorio hace ya mucho tiempo redactado por una comisión donde había también funcionarios municipales”.
Fueron los vecinos quienes denunciaron que el municipio había sido el que ejecutó de manera irregular la red de agua potable para el sector.
“Apuran los procesos para continuar con la obra del Metrobus en detrimento de un servicio básico esencial que luego deberemos operar y responsabilizarnos nosotros”, concluyó Rodríguez.
