NEUQUÉN (ED) — Lo que antes era una casi una utopía ahora es realidad. La capital neuquina tiene un restaurante donde todos sus productos son libres de gluten. Se trata de Mi cocina, ubicado en Avenida Argentina 388.
Atendido por su propietaria Silvina Sartori, el lugar es mucho más un servicio de cocina por que como dice su vidriera: “Se cocina con amor”, y aclara que los clientes “no te piden un café, te dicen ‘gracias’, acá se respira otra energía”.
Su emprendimiento surgió como fabricación de pan en 2013. Motivada por su madre que sufría la celiaquía y cansada de que recorrer mucho, vivenció una necesidad y pensó en un emprendimiento que brindara solución a muchas personas que no pueden consumir derivados del trigo, avena, cebada o centeno por problemas de salud.
“Nosotros abrimos el primer lugar donde se puede sentar a compartir”, señaló y evidenció las limitaciones que los celíacos muchas veces enfrentan en la vida diaria, por no poder compartir el mate o un almuerzo con amigos. “En este lugar se respira otro aire, otra energía. Acá no te dicen mozo un café acá la gente llega y te dice gracias, es la primera palabra. Hay gente que te abraza, que se emociona”.
El establecimiento ofrece todo el menú sin gluten y es apto para todo público. “Todo lo que hacemos no tiene diferencia de sabor ni de precios con la comida tradicional”, aclaró y extendió la invitación a disfrutar de la propuesta.
Hoy ofrece una carta libre de trigo, avena, cebada y centeno (TAAC) y con la exigencia de que cada producto tenga el sello “Sin TAAC” otorgado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
Mi cocina cuenta con 3 cocineros, que trabajan en dos cocinas separadas en la elaboración de salado y dulce.
Este fin de semana abrieron por primera vez un sábado y lograron plena ocupación de las mesas. “La gente está muy feliz y el mensaje que te dicen es gracias. La frase de los clientes es la misma: te estábamos persiguiendo por todos lados”, indicó.
